El futuro de la iluminación en el nuevo sector retail

El sector de retail es un sector que se ha visto fuertemente transformado durante los últimos años. La aceleración de ciertas tendencias y comportamientos por parte de los consumidores han hecho que los espacios comerciales estén cambiando y adaptando su experiencia de cara al consumidor. 

La iluminación siempre ha sido considerada como un elemento clave para proporcionar la mejor experiencia posible a los clientes. A parte de potenciar la marca a través de la integración con el proyecto de interiorismo, contribuye a optimizar el flujo tanto de trabajadores como de consumidores.

La diversidad de los espacios que conforman un comercio es muy amplia: escaparates, zona de ventas general, área expositiva en vitrinas, zona perimetral o de circulación, área de atención en mostradores y vestidores, etc. Todos ellos deben contar con una iluminación diferenciada que atienda a las necesidades emocionales y funcionales de cada espacio. Eso sí, alineándose siempre con la estrategia de comunicación y posicionamiento que cada marca ofrece a través de su imagen corporativa. 

Algunas de las tendencias que están marcando estas transformaciones del sector retail son:

• La migración de las grandes marcas al centro de las ciudades;
• El auge de comercio de proximidad;
• Una mayor sensibilidad ecológica por parte de los consumidores;
• El crecimiento exponencial del comercio electrónico.

A continuación, detallamos algunas de las transformaciones que los espacios comerciales están llevando a cabo para adaptarse a estas tendencias. Por otro lado veremos cómo la iluminación, un elemento clave en la generación de la experiencia de compra, responde a estas necesidades.

La iluminación como focalizador de la atención en el retail urbano

Los espacios comerciales en las ciudades exigen una mayor integración con el entorno urbano a la vez que mantienen la intención de captar la atención de los viandantes. 

Los escaparates son la carta de presentación de la experiencia que se ofrece en su interior. Por eso, la iluminación de estas áreas puede llegar a tener un componente escénico, ya que se convierte en la primera llamada de atención para el público. A la vez que debe ser respetuosa con el entorno y no generar contaminación lumínica o un exceso de luz intrusiva. El dinamismo de la iluminación se convierte en un recurso capaz de captar la atención y, también, permite ir modificando los efectos lumínicos acompañando los cambios del diseño o la temporada.

En el área de ventas general, la iluminación ayuda a realzar ciertos puntos a través de diferentes niveles de iluminación o incluso efectos lumínicos de acentuación. Incluso llegando a resaltar y marcar la jerarquía espacial de los denominados “puntos calientes” del espacio comercial (aquellos que cobran una mayor relevancia y que tienen como objetivo captar más tráfico al ser los más transitados y visibles). De esta forma, mediante la iluminación, podemos ayudar a resaltar el mostrador, vitrinas u otras zonas de especial relevancia, ayudando al usuario a identificarlos con mayor facilidad.

Para lograr estos efectos de llamada de atención, la iluminación de una tienda cuenta con tres capas de iluminación:

• La iluminación horizontal general, que en función de la imagen de marca y la intención deseada será más o menos tenue;
• La iluminación vertical, que nos permitirá bañar aquellos planos verticales que interese resaltar, a la vez que nos aporta una mejor percepción espacial;
• La iluminación de acentuación, que centrará la atención en puntos concretos. El balance en cuanto al contraste lumínico de esta acentuación también acompaña a la intención de comunicación y posicionamiento de la marca. Esto se debe a que buscará conseguir efectos más o menos dramáticos con esta última capa de iluminación.

Para resolver este tipo de iluminación, se pueden usar proyectores orientables de la familia Hance. Gracias a la amplitud de las aperturas de su reflector (10º - 37º) y la combinación de accesorios ópticos como la lente elíptica o la lente Soft, permiten resolver con una sola familia todas las necesidades lumínicas.